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"Tiempos, pus modernos"
La modernidad, la postmodernidad, en sí, estos conceptos han dado claros ejemplos de cómo se vive. Y ahora en la política como en la posmodernidad, todo se vale, todo cuenta. Y bueno, las medidas represoras y controladoras del gobierno dictatorial del PRI no han desaparecido, ahora para mal, el PAN ha seguido firmemente los pasos de aquellos hijos de puta que prefieren callar bocas, enriquecer carteras y alimentar la corrupción. Y más que eso, se viven tiempos de mentiras, de mediocridad, de lobos vestidos de oveja y sobre todo, gobernantes que hablan y dicen pero no hacen nada. Claros son los ejemplos como el de Santiago Creel quien día a día afirma, asegura y propone que el país vive un excelente estado de gobernabilidad, cuando sufrimos más que hace 3 años, y no quiero parecer de esos comentaristas que un día prefieren al PAN y otro al PRI. Yo siempre he ido en contra de todos ellos, estoy seguro que en el país NO hay un sólo gobernante limpio, y si lo hubiese, ya lo mataron. Además, otros personajes como el Tío Simi (dueño de las farmacias fraudulentas que venden pastillas como si fueran dulces piratas), quiere formar una masa de aspirantes a la política aludiendo la lucha contra la corrupción cuando su sobrino es otro de tantos que demuestran que sin corrupción no pueden vivir. Y no olviden, que de tal palo, tal astilla. No es posible creer que un tío intente ser anti corrupto y su sobrino sea otro de tantos corruptibles, eso no lo creo. Y casos más trágicos están en el PRI y lamentablemente en el resto de partiduchos políticos. Otros asuntos han pasado desapercibidos, los tantos apoyos al gobierno yanqui, y ahí no hay pruebas. Por ejemplo, no se sabe cuánto, quiénes y cómo reciben dinero quienes permiten que los yanquis o los españoles saqueen nuestros bienes naturales, a costa de quién. No puedo entender que los políticos mexicanos sean tan buenos para hablar, pero son los peores en actuar y nadie es capaz de cortar de un sólo hachazo la corrupción. Porque si lo pensamos, no es dificil acabar con la corrupción, es más fácil que los gobernantes prefieran dinero a la verdad. Y ahora, como lo he escrito desde octubre y lo he pensado desque era un pequeño, la política mexicana apesta. Es claro que la política mexicana es de las más corruptas en el país, que los políticos y gobernantes abusan del poder, que hacen mal uso de los impuestos, que se enriquecen, que mienten y que digan lo que digan, con su fuero constitucional, millones de gobernantes y ex gobernantes ahora disfrutan de una vida de lujos, mientras más de 70 millones de mexicanos no tiene ni para comer. Los asuntos importantes para este país, creo que son muchísimos, pero en sí, los más urgentes para resolver serían, la buena administración gubernamental, porque sé que si desde el gobierno no se actúa bien, hasta los más pobres actuarán mal y creo que haciendo un análisis claro, no será posible un cambio en México si los gobernantes no son los primeros en hacerlo. Hasta no ver claro, la ciudadanía no actuará, los mexicanos están además de cansados, muertos de hambre, sin educación, sin bienes, con deudas, con enfermedades, sin apoyo moral, sin apoyo económico y sobre todo desempleados.
No es posible, que ahora, los casos del "Niño Verde" y muchos más sigan impunes, que los políticos sigan dando vueltas a los asuntos más importantes que son esclarecer la verdad y limpiarse de la corrupción. Justo hoy que es miércoles de ceniza, aunque no soy muy fiel devoto a la manipulación eclesíastica, bien les haría una limpia y arrepentimiento. Ojalá que pronto se resuelvan estos casos y que nuestro país, lento o rápido comience ahora sí a girar alrededor de la verdad y al justicia. Hasta que eso no pase, tendremos al PRI, al PAN, al PRD, al PVEM gobernando y nosotros muriendo de hambre.
miércoles, febrero 25, 2004
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